Este tipo de corrosión se manifiesta en el interior de las instalaciones generándose la perdida del material de la instalación hasta que el mismo no soporta el esfuerzo mecánico y se pincha. Generalmente se manifiesta en las cañerías de distribución y accesorios de conexionado.
La corrosión microbiológica está dada por la presencia de bacterias sulfato reductoras meso filas que se nutren de hierro incorporándolo a su proceso metabólico para su desarrollo.
A través de un análisis físico-químico y bacteriológico del agua en distintos puntos de la instalación deberá determinarse la presencia de alguno de los siguientes grupos bacterianos generadores de MIC como así también deberán determinarse los valores de PH, conductividad, dureza total, bicarbonatos, calcio e índice de Langelier.
Una vez obtenidos los resultados deberá corregirse químicamente el agua contenida en la red para poder eliminar las bacterias generadoras de MIC.